domingo, 30 de noviembre de 2014

… Y Dios, ¿Qué opina de ti?

“… te puse nombre, mío eres tú” 

Isaías 43



Es cierto que cuando crecemos en un hogar sano y cimentado a Dios, nuestros padres nos hacen crecer creyendo y dependiendo en Dios, sabiendo que somos hijos de Dios y que el nos ama. Sin embargo el problema es cuando crecemos alejado de ese hogar que Dios espera. Muchas veces las opiniones de nuestros propios padres nos marcan y nos hacen caer en inseguridades, falta de amor, baja autoestima y una larga lista de etcéteras.

El problema se hace más difícil cuando, nuestros “amigos” o “maestros” opinan sobre nosotros, el bullying por ejemplo es un problema que últimamente se ha reconocido su gravedad, sin embargo es un problema que siempre ha existido (estoy seguro que la mayoría de nosotros la sufrimos en alguna etapa en nuestra vida estudiantil).

Estas son las opiniones que otras personas tienen sobre nosotros, muchas de esas opiniones, marcan nuestro interior, si un niño se la pasa escuchando la mayor parte de su vida que: “no sirve de nada”, que “es un error”, que “nadie lo quiere” que “es un bueno para nada”, al paso del tiempo el niño termina creyendo todo eso que los demás dicen de él. Ese es un gran problema para la vida de los hombres, crecen con esa baja autoestima y esa definición errónea de ellos mismos.

Alguna vez te has puesto a pensar ¿Qué es lo que Dios opina de ti? Ni más ni menos, Dios es nuestro creador. Somos su obra maestra. Dios entregó a su unigénito hijo, para salvar nuestra vida. ¿Crees que Dios opine algo malo de ti?

Es cierto que somos pecadores, es cierto que desde nuestro interior brote esa misma acusación de nuestro pecado y nos haga sentir indignos de acercarnos a Dios, incluso nos haga sentir sucios y nosotros mismos nos definamos como indignos, sin valor, buenos para nada y una larga lista… Pero ¿Sabes una cosa? esa es la definición o la opinion que tenemos de nosotros mismos… y por gracia, Dios opina diferente.

Isaías 43:4
“porque a mis ojos fuiste de gran estima, fuiste honorable y yo te amé; daré, pues, hombres por ti, y naciones por tu vida”

Eso es lo que Dios opina de ti. ¿Qué tan importante eres para que Dios no solo de hombres por ti, sino naciones enteras por tu vida? Porque Dios no solo te vio como gran estima u honorable… ¡Dios te amó! ¿Quien somos nosotros para que Dios nos amara? No importa la opinion que otros tengan de ti, no importa la opinion que tus padres en la tierra tengan de ti, ni siquiera importa la opinion que tu mismo tengas de ti; lo que importa es lo que Dios opina de ti, eso es lo que te define dándote un significado; Dios es nuestro creador y nadie más que él, sabe exactamente quienes somos.

Cuando sientas baja autoestima, cuando la situación al rededor tuyo te haga sentir que “no vales nada”, que todo lo malo que te está pasando te lo mereces porque “no sirves para nada”, en ese momento no escuches a los demás, ni siquiera te escuches a ti mismo, escucha lo que Dios dice de ti. “fuiste de gran estima, fuiste honorable y yo te amé”.

Cuando realmente creas que nada de lo que está pasando se puede solucionar, cuando sientas que realmente no hay una salida a lo que te está pasando, cuando la situación en tu alrededor te haga creer que nada va a salir bien, no la escuches; cuando la gente te diga que ya todo está perdido, no la escuches, cuando tu propio entendimiento y tu lógica te diga que ya no hay nada que hacer, no te escuches. Escucha lo que Dios te está diciendo a ti “Cuando pases por las aguas, yo estaré contigo; y si por los ríos, no te anegarán. Cuando pases por el fuego, no te quemarás, ni la llama arderá en ti” Isaías 43:2.

y ¿Qué opina Dios de ti? Su palabra es la que te define, no eres quien otros dicen que eres, no eres quien tu crees que eres, eres lo que Dios tu creador dice que eresde gran estima, honorable y digno de amarte.

Dios te bendiga.