Me agrada leer de la vida de Juan el Bautista, desde el inicio, su vida es sorprendente, su nacimiento también fue anunciado por un ángel a su padre, y el llevo una vida apartada del mundo, viviendo en el desierto comiendo langostas y miel silvestre.
Juan el bautista fue un gran predicador, y mucha gente le seguía, sin embargo su forma de predicación fue la de siempre poner los ojos en el Cristo. Y el siempre enseño de Jesús. “El que vendría después de él, que era antes que el”
Al venir Jesús a Juan el bautista él le pide su bautismo, aceptando así el ministerio de Juan el bautista, y Juan sabia y entendía que el que necesitaba el bautismo de Jesús era él mismo. El propósito de Jesús era aceptar la voluntad de Dios completamente con su vida; Juan obedeció a Jesús quien le pidió el bautismo.
Dios declaro que Jesús es su hijo amado en quien se complace, era a quien debemos oír, Juan obedeció las palabras de Dios y agradó a Dios con su vida.
En nuestra vida, hay muchas cosas que duele aceptarlas o el simple hecho de seguirlas, para Juan el Bautista sería muy difícil el bautizar a Jesus sabiendo que Jesus es Cristo y que los hombres pecadores somos los que necesitamos el bautismo no el hijo de Dios. Sin embargo por muy difícil que fuera para él, bautizo humildemente a Jesus.
En nuestro “plano” espiritual, la obediencia es importante, si con nuestra vida somos fieles en escuchar y fieles en obedecer a Dios, Dios hace su obra también a través de nuestras vidas, Juan fue un gran predicador y un gran pastor de ovejas, sin embargo, antes que eso fue un siervo fiel que acepto completamente la palabra de Dios y la visión que Dios tenia para su vida.
Si somos obedientes para la palabra de Dios, Dios se agrada y nos utiliza.
Le doy gracias a Dios porque me permitió descubrir el propósito de mi vida, ahora sé que la única preocupación que debo de tener mi vida es en ocuparme para obedecer y cumplir la palabra de Dios. Así Dios utiliza mi vida para hacer su obra y se agrada de ella.
viernes, 29 de enero de 2010
sábado, 23 de enero de 2010
MI ANHELO Y ESPERANZA
PALABRA/ FILIPENSES 1:1-30
V. CLAVE/ FILIPENSES 1:20
Doy gracias a Dios por esta palabra, Oro para que Dios me dé el anhelo y la esperanza en Cristo. Dios es el señor todo poderoso, en quien debe de estar toda mi confianza y en quien debe de estar dirigido todo mi esfuerzo. Oro para ser el obrero fiel y que el único anhelo de mi vida sea ensalzar a mi señor Jesús.
De esta palabra aprendo de Pablo el corazón de pastor que se dirige a sus ovejas. Filipenses es llamada, por muchos eruditos de la biblia, la carta de amor, gratitud y alabanza. En esta carta Pablo Muy sencillamente se identifica y fortalece a sus ovejas. En ese tiempo Pablo escribía desde la cárcel. Al leer su carta a los filipenses se puede percibir un interior agradecido con Dios, e incluso un interior que fortalece.
No puedo imaginar, como seria estar en una cárcel, seguramente es una estancia nada agradable, sé que muchos reos con influencias muy fuertes, reciben tratos especiales, sin embargo en ese tiempo, Pablo había ido en contra de Roma y muy seguramente el trato que le tocaba era nada agradable, sin embargo esto no debilitó su espíritu, humanamente dentro de la cárcel el tendría que estar recibiendo palabras de consuelo de los de afuera, pero él era el que consolaba a sus ovejas e incluso exhortaba a los suyos. Aprendo de Pablo el espíritu de nunca rendirse.
¿Cómo hizo Pablo para nunca rendirse? Él sabia de la oración de todos sus siervos, Pablo confió y se fortaleció con la oración intercesora de los filipenses, también el espíritu de Cristo, le llenó de gozo su interior y le fortaleció cuando más lo necesitaba. Aun así desde dentro de la cárcel Pablo siguió muy seguramente creciendo a los discípulos y haciendo la obra de Dios.
El versículo 20 comienza diciendo “Conforme a mi anhelo…” según la carta, puedo entender que el verdadero anhelo de Pablo, no era ser liberado, sino que nada le impidiera el ensalzar y dar gloria al nombre de Cristo, ese era su verdadero anhelo y su verdadera esperanza. No importa si Pablo estaba libre en la ciudad predicando o si estaba encerrado en una cárcel fría, el verdadero anhelo en su interior era que nada le impidiera ensalzar el nombre de Cristo. Por eso aun dentro de la cárcel el tenia el ánimo para hacer la obra de Dios, para exhortar a sus ovejas y para animar a los líderes de la iglesia.
El versículo 20 continua diciendo “…. En nada seré avergonzado” No quiere decir que Pablo esperara una vida sin problemas a causa de servir a Cristo, sino que el sabia que estando de lado de Cristo siempre tendría la victoria y el triunfo de la vida de fe. “o por vida o por muerte” El Cristiano verdadero da verdadera gloria al nombre de Cristo con su vida entregada y por su trabajo. Pablo si no moría, seguiría engrandeciendo el nombre de Cristo, gracias a su predicación y a su trabajo para la obra. Si Pablo moría, Cristo también seria engrandecido gracias a su muerte ya que lo hacía por dar gloria al nombre de Cristo.
El pensamiento de Pablo estaba verdaderamente enfocado en servir a Cristo con todo el corazón, “el vivir es Cristo” todos sus planes, esperanzas y aspiraciones se centraban en el Señor, para él el vivir, no solo significaba el acto egoísta de aferrarse a la vida, sino que lo haría para ensalzar al Señor. “El morir es ganancia” la muerte para los hombres significa perdida, por eso los hombres se ponen tristes ante la muerte de los seres queridos pero para pablo la muerte significaba “ganancia”. Si bien su principal preocupación era ensalzar a su Señor, también si la decisión de su Señor era la muerte, Él la aceptaría y aun así el último sentimiento de Pablo era haber terminado de la mejor manera la obra del Señor.
Dios al que llama como su siervo siempre le da la oportunidad de ir creciendo. Dios llama a sus siervos y los establece como los que hacen su obra. Algunos en su vida de fe crecen creyendo que la vida de los cristianos es en la que no hay tribulaciones o es el tipo de vida de “vivir felices para siempre” ciertamente al servir a Cristo “vivimos felices para siempre” pero nuestra felicidad difiere de la felicidad de los hombres. Nuestra felicidad se centra en las tribulaciones que tenemos al servir a Cristo, muchas de ellas con los que amamos o con los hombres del mundo. Siempre hay tribulaciones u obstáculos por pasar, y con estas tribulaciones nos gozamos, ya que Dios está creciendo nuestra fe y nuestra verdadera esperanza. Seguramente la vida dentro de la cárcel sería algo que nadie en su sano juicio, quisiera experimentar por voluntad propia, y aun en esa circunstancia Pablo se gozaba de servir la obra de Dios.
Soy de las personas que no le gusta vivir con problemas o con disgustos con otras personas, me gusta vivir tranquilamente y relajado. He aprendido a evitar muchos problemas con las personas y a llevarme bien con todos gracias a mi carácter, sin embargo eso no me exenta de padecer tribulaciones. Creo que las peores tribulaciones que podemos tener al decidiera seguir a Cristo con nuestra vida es en la familia, ellos son las personas que amas con todo tu corazón y recibir persecución de ellos, hace que de verdad se entristezca tu corazón. Dios me permitió recibir ese tipo de tribulación y me gocé en ellas, aprendí a depender en mi Señor y él me hizo fuerte. Dios me ama y nunca me ha dejado solo en mi vida. Este año me permite muchos retos y me gozo también en este tipo de retos. El conseguir un trabajo fuera de la ciudad se ha hecho en cierto punto una tribulación, no es fácil regresar cada fin de semana, pero es algo que estoy dispuesta a enfrentar. Me gusta alabar y servir a mi Señor.
¿Cuál es el plan que Dios tiene preparado para mí? Eso no lo sé, mi título de Oración desde hace unos meses ha sido para que Dios haga su voluntad con mi vida, si él me quería llevar a otra ciudad, que me llevara, si él me quería dejar en Guadalajara, que me dejara. Y él está respondiendo poco a poco la oración y estoy agradecido.
En este año quiero aprender el espíritu de nunca rendirse, como lo hizo Pablo y con ese espíritu servir a Dios en todas las actividades de mi día. En mi trabajo, en mi familia y en la iglesia al predicar el evangelio a los jóvenes.
Gracias Señor por llamarme a servir. Oro para que a través de la tribulación, crezca y aprenda a depender completamente en usted todos los días de mi vida.
Una palabra: Mi anhelo y mi esperanza está en Cristo mi Señor.
V. CLAVE/ FILIPENSES 1:20
Conforme a mi anhelo y esperanza de que en nada seré avergonzado; antes bien con toda confianza, como siempre, ahora también será magnificado Cristo en mi cuerpo, o por vida o por muerte.
Doy gracias a Dios por esta palabra, Oro para que Dios me dé el anhelo y la esperanza en Cristo. Dios es el señor todo poderoso, en quien debe de estar toda mi confianza y en quien debe de estar dirigido todo mi esfuerzo. Oro para ser el obrero fiel y que el único anhelo de mi vida sea ensalzar a mi señor Jesús.
De esta palabra aprendo de Pablo el corazón de pastor que se dirige a sus ovejas. Filipenses es llamada, por muchos eruditos de la biblia, la carta de amor, gratitud y alabanza. En esta carta Pablo Muy sencillamente se identifica y fortalece a sus ovejas. En ese tiempo Pablo escribía desde la cárcel. Al leer su carta a los filipenses se puede percibir un interior agradecido con Dios, e incluso un interior que fortalece.
No puedo imaginar, como seria estar en una cárcel, seguramente es una estancia nada agradable, sé que muchos reos con influencias muy fuertes, reciben tratos especiales, sin embargo en ese tiempo, Pablo había ido en contra de Roma y muy seguramente el trato que le tocaba era nada agradable, sin embargo esto no debilitó su espíritu, humanamente dentro de la cárcel el tendría que estar recibiendo palabras de consuelo de los de afuera, pero él era el que consolaba a sus ovejas e incluso exhortaba a los suyos. Aprendo de Pablo el espíritu de nunca rendirse.
¿Cómo hizo Pablo para nunca rendirse? Él sabia de la oración de todos sus siervos, Pablo confió y se fortaleció con la oración intercesora de los filipenses, también el espíritu de Cristo, le llenó de gozo su interior y le fortaleció cuando más lo necesitaba. Aun así desde dentro de la cárcel Pablo siguió muy seguramente creciendo a los discípulos y haciendo la obra de Dios.
El versículo 20 comienza diciendo “Conforme a mi anhelo…” según la carta, puedo entender que el verdadero anhelo de Pablo, no era ser liberado, sino que nada le impidiera el ensalzar y dar gloria al nombre de Cristo, ese era su verdadero anhelo y su verdadera esperanza. No importa si Pablo estaba libre en la ciudad predicando o si estaba encerrado en una cárcel fría, el verdadero anhelo en su interior era que nada le impidiera ensalzar el nombre de Cristo. Por eso aun dentro de la cárcel el tenia el ánimo para hacer la obra de Dios, para exhortar a sus ovejas y para animar a los líderes de la iglesia.
El versículo 20 continua diciendo “…. En nada seré avergonzado” No quiere decir que Pablo esperara una vida sin problemas a causa de servir a Cristo, sino que el sabia que estando de lado de Cristo siempre tendría la victoria y el triunfo de la vida de fe. “o por vida o por muerte” El Cristiano verdadero da verdadera gloria al nombre de Cristo con su vida entregada y por su trabajo. Pablo si no moría, seguiría engrandeciendo el nombre de Cristo, gracias a su predicación y a su trabajo para la obra. Si Pablo moría, Cristo también seria engrandecido gracias a su muerte ya que lo hacía por dar gloria al nombre de Cristo.
El pensamiento de Pablo estaba verdaderamente enfocado en servir a Cristo con todo el corazón, “el vivir es Cristo” todos sus planes, esperanzas y aspiraciones se centraban en el Señor, para él el vivir, no solo significaba el acto egoísta de aferrarse a la vida, sino que lo haría para ensalzar al Señor. “El morir es ganancia” la muerte para los hombres significa perdida, por eso los hombres se ponen tristes ante la muerte de los seres queridos pero para pablo la muerte significaba “ganancia”. Si bien su principal preocupación era ensalzar a su Señor, también si la decisión de su Señor era la muerte, Él la aceptaría y aun así el último sentimiento de Pablo era haber terminado de la mejor manera la obra del Señor.
Dios al que llama como su siervo siempre le da la oportunidad de ir creciendo. Dios llama a sus siervos y los establece como los que hacen su obra. Algunos en su vida de fe crecen creyendo que la vida de los cristianos es en la que no hay tribulaciones o es el tipo de vida de “vivir felices para siempre” ciertamente al servir a Cristo “vivimos felices para siempre” pero nuestra felicidad difiere de la felicidad de los hombres. Nuestra felicidad se centra en las tribulaciones que tenemos al servir a Cristo, muchas de ellas con los que amamos o con los hombres del mundo. Siempre hay tribulaciones u obstáculos por pasar, y con estas tribulaciones nos gozamos, ya que Dios está creciendo nuestra fe y nuestra verdadera esperanza. Seguramente la vida dentro de la cárcel sería algo que nadie en su sano juicio, quisiera experimentar por voluntad propia, y aun en esa circunstancia Pablo se gozaba de servir la obra de Dios.
Soy de las personas que no le gusta vivir con problemas o con disgustos con otras personas, me gusta vivir tranquilamente y relajado. He aprendido a evitar muchos problemas con las personas y a llevarme bien con todos gracias a mi carácter, sin embargo eso no me exenta de padecer tribulaciones. Creo que las peores tribulaciones que podemos tener al decidiera seguir a Cristo con nuestra vida es en la familia, ellos son las personas que amas con todo tu corazón y recibir persecución de ellos, hace que de verdad se entristezca tu corazón. Dios me permitió recibir ese tipo de tribulación y me gocé en ellas, aprendí a depender en mi Señor y él me hizo fuerte. Dios me ama y nunca me ha dejado solo en mi vida. Este año me permite muchos retos y me gozo también en este tipo de retos. El conseguir un trabajo fuera de la ciudad se ha hecho en cierto punto una tribulación, no es fácil regresar cada fin de semana, pero es algo que estoy dispuesta a enfrentar. Me gusta alabar y servir a mi Señor.
¿Cuál es el plan que Dios tiene preparado para mí? Eso no lo sé, mi título de Oración desde hace unos meses ha sido para que Dios haga su voluntad con mi vida, si él me quería llevar a otra ciudad, que me llevara, si él me quería dejar en Guadalajara, que me dejara. Y él está respondiendo poco a poco la oración y estoy agradecido.
En este año quiero aprender el espíritu de nunca rendirse, como lo hizo Pablo y con ese espíritu servir a Dios en todas las actividades de mi día. En mi trabajo, en mi familia y en la iglesia al predicar el evangelio a los jóvenes.
Gracias Señor por llamarme a servir. Oro para que a través de la tribulación, crezca y aprenda a depender completamente en usted todos los días de mi vida.
Una palabra: Mi anhelo y mi esperanza está en Cristo mi Señor.
miércoles, 6 de enero de 2010
El hombre se hizo un ser viviente
Génesis 2:1-7 [2:7]
Entonces Jehová Dios formó al hombre del polvo de la tierra, y sopló en su nariz aliento de vida, y fue el hombre un ser viviente.
En esta lectura aprendo de Jehová Dios, el Dios creador de los cielos y la tierra y de todos los ejércitos de ellos, es decir el Dios omnipotente creador de todas las cosas. Dios bendijo el día séptimo porque en el terminó todas las cosas, y porque en este día el reposó; el verbo reposar, viene de la palabra sabath que significa literalmente “cesar”, Dios no descansó porque estuviera agotado, o cansado, sino que Dios “cesó” de trabajar porque su obra había terminado.
La obra de Dios siempre es finalizada, Dios no dejó su trabajo inconcluso. De esta palabra aprendo del Dios omnipotente y del Dios todopoderoso que cumple su obra, Dios estableció el séptimo día como el día de reposo y bendijo este día, de este mismo modo, los hombres somos creados por Dios, nuestro propósito, entonces, es terminar nuestro trabajo y guardar el día del Señor cada semana, si lo hacemos fielmente entonces los hombres podemos experimentar la bendición de Dios.
Dios había preparado un paraíso perfecto y hermoso, sin embargo faltaba quien lo labrara, toda la naturaleza y la creación de Dios esperaba quien administraría esa creación y la haría dar los frutos agradables a su creador. Así como una orquesta, con todos los instrumentos afinados y todos los miembros atentos, esperan la llegada del director para interpretar las más hermosas melodías.
En este capítulo la palabra nos explica detalladamente de la creación del hombre, Dios moldeo del polvo de la tierra al hombre, y soplo en su nariz el aliento de vida, y fue entonces hasta ese momento que el hombre fue un ser viviente. De esta manera aunque Dios formo al hombre del polvo de la tierra, fue vivo hasta que le soplo el aliento de vida, Dios formo al hombre como un ser espiritual, la vida del hombre viene de Dios y por tanto pertenece a Dios, de esta manera nuestra principal necesidad como creación de Dios es que debemos de agradar a Dios y nuestra vida debe de estar en perfecta relación con nuestro creador.
Aprendimos de Génesis 1 que Dios nos creo a su imagen y semejanza, en este capítulo aprendo del Dios creador que finaliza perfectamente su obra y que descansa después de ver lo maravilloso de su creación. Los hombres buscamos esa esencia con la cual Dios nos creó, Los hombres debemos de ser los que no dejan sus obras inconclusas, debemos de terminar creativamente nuestra obra delante de Dios y que esta obra agrade a nuestro Señor.
Así como la obra maestra de un artista, exalta su nombre y agrada al artista, tanto como para exponerla en galerías. Nuestra vida que es la obra maestra de Dios, debe engrandecer, alabar y exaltar su nombre y en todo momento debemos de llevar los frutos agradables a Dios a través de terminar creativamente nuestra obra delante de Dios y guardando el día del Señor, de esta manera podremos experimentar activamente su bendición.
Le doy gracias a Dios por recordarme a través de esta palabra mi origen y mi propósito verdadero como creación de Dios, oro para que Dios me permita cada día de mi vida, terminar activa y creativamente mi trabajo delante de Dios, no dejando mi obra inconclusa, oro para reposar en su presencia, guardando el día del Señor.
Una palabra, mi vida viene de Dios.
La obra de Dios siempre es finalizada, Dios no dejó su trabajo inconcluso. De esta palabra aprendo del Dios omnipotente y del Dios todopoderoso que cumple su obra, Dios estableció el séptimo día como el día de reposo y bendijo este día, de este mismo modo, los hombres somos creados por Dios, nuestro propósito, entonces, es terminar nuestro trabajo y guardar el día del Señor cada semana, si lo hacemos fielmente entonces los hombres podemos experimentar la bendición de Dios.
Dios había preparado un paraíso perfecto y hermoso, sin embargo faltaba quien lo labrara, toda la naturaleza y la creación de Dios esperaba quien administraría esa creación y la haría dar los frutos agradables a su creador. Así como una orquesta, con todos los instrumentos afinados y todos los miembros atentos, esperan la llegada del director para interpretar las más hermosas melodías.
En este capítulo la palabra nos explica detalladamente de la creación del hombre, Dios moldeo del polvo de la tierra al hombre, y soplo en su nariz el aliento de vida, y fue entonces hasta ese momento que el hombre fue un ser viviente. De esta manera aunque Dios formo al hombre del polvo de la tierra, fue vivo hasta que le soplo el aliento de vida, Dios formo al hombre como un ser espiritual, la vida del hombre viene de Dios y por tanto pertenece a Dios, de esta manera nuestra principal necesidad como creación de Dios es que debemos de agradar a Dios y nuestra vida debe de estar en perfecta relación con nuestro creador.
Aprendimos de Génesis 1 que Dios nos creo a su imagen y semejanza, en este capítulo aprendo del Dios creador que finaliza perfectamente su obra y que descansa después de ver lo maravilloso de su creación. Los hombres buscamos esa esencia con la cual Dios nos creó, Los hombres debemos de ser los que no dejan sus obras inconclusas, debemos de terminar creativamente nuestra obra delante de Dios y que esta obra agrade a nuestro Señor.
Así como la obra maestra de un artista, exalta su nombre y agrada al artista, tanto como para exponerla en galerías. Nuestra vida que es la obra maestra de Dios, debe engrandecer, alabar y exaltar su nombre y en todo momento debemos de llevar los frutos agradables a Dios a través de terminar creativamente nuestra obra delante de Dios y guardando el día del Señor, de esta manera podremos experimentar activamente su bendición.
Le doy gracias a Dios por recordarme a través de esta palabra mi origen y mi propósito verdadero como creación de Dios, oro para que Dios me permita cada día de mi vida, terminar activa y creativamente mi trabajo delante de Dios, no dejando mi obra inconclusa, oro para reposar en su presencia, guardando el día del Señor.
Una palabra, mi vida viene de Dios.
domingo, 3 de enero de 2010
al que cree todo le es posible
“Jesús le dijo: Si puedes creer, al que cree todo le es posible.”
Marcos 9:23
Este año que terminó ha sido un año de retos y pruebas que Dios puso en mi vida para poder crecer y enseñarme a confiar en su misericordia y amor. También Dios me dio muchas bendiciones me permitió servirle a través de muchas actividades y lleno mi interior de gozo a través de las conferencias en este año. Dios abrió mis ojos y me permitió ver el deseo que tiene para mi vida, ahora más que nunca se que él quiere que sea el pastor de sus ovejas, descubrí nuevamente el poder de la oración, el Señor respondió mi oración y trajo a las ovejas.
Mi versículo clave del año pasado fue: Santifícalos en tu verdad; tu palabra es verdad. [Juan 17:17], con este versículo a lo largo del año, descubrí lo que verdaderamente Dios quiere para mi vida, a través de su palabra aprendí la verdadera dirección de Dios para mi vida, descubrí que Dios tiene preparadas muchísimas cosas por hacer con mi vida. En este año a través del mensaje de la conferencia de otoño, Dios hablo a mi corazón, y me hizo desafiar mi miedo a servir la obra, me hizo desafiarme a mi propio entendimiento y me hizo ver los campus listos para ser servidos. Me hizo dejar de refugiarme en mi mismo y pensar en una obra pequeña y comenzar a ver todo lo que Dios tiene preparado para mí.
Hoy celebramos y preparamos nuestro corazón, a través de esta conferencia de líderes y queremos fortalecernos en oración, y preparar nuestra obra para este año 2010. Dios ya ha comenzado a responder mis oraciones y sé que será un año lleno de retos y luchas. Al ver la gran obra que está por venir no puedo dejar de sentir incertidumbre y miedo, pero es porque aun me veo a mi mismo. En este próximo año Dios quiere que aprenda a depender completamente en El y solo en El, al servir la obra. La incertidumbre siempre está presente, aun ahora no se qué rumbos esta por tomar mi vida, sin embargo se que esos caminos los hare de la mano del Señor y que no estaré en problema, si me aferro a mi Señor y creo en él.
El versículo en el cual estará basado el año 2010 personalmente será: Marcos 9:23: “Jesús le dijo: Si puedes creer, al que cree todo le es posible.” Con este versículo quiero aprender a creer verdaderamente. No que no crea en el señor, sino que quiero aprender la actitud de siempre creer en el señor, sin importar el lugar o la situación en la que este, siempre creer en el señor, sin importar lo lejos o lo cerca que este de mi familia, siempre creer en el señor, sin importar lo bien o lo mal que este mi salud, siempre creer en el señor, si logro aprender la actitud de siempre creer en el señor, este nuevo año será de crecimiento y madurez espiritual. Yo se que en el diccionario de Dios no existe la palabra imposible, y que también debo de quitarla del mío, esta palabra solo es una escusa a mi falta de fe y a mi incredulidad. Quiero aprender de Dios y ver todas las cosas como posibles en la obra de Dios, para ello debo de aprender el espíritu de creer verdaderamente.
Le Doy gracias a Dios, porque nunca me ha abandonado y a lo largo de los años que llevo conociéndolo siempre ha respondido mis oraciones y este año más que nunca me permite nuevas pruebas y nuevos retos para enseñarme a depender y confiar en su misericordia y en el plan que tiene para mí.
Oro para que en este año pueda enfocarme en crecimiento y madurez espiritual basando mi año en Marcos 9.23. Con este versículo desafiar mi miedo y mi incredulidad y permitir a Dios hacer su gran obra a través de mi vida.
Una palabra: al que cree todo le es posible!
Mi versículo clave del año pasado fue: Santifícalos en tu verdad; tu palabra es verdad. [Juan 17:17], con este versículo a lo largo del año, descubrí lo que verdaderamente Dios quiere para mi vida, a través de su palabra aprendí la verdadera dirección de Dios para mi vida, descubrí que Dios tiene preparadas muchísimas cosas por hacer con mi vida. En este año a través del mensaje de la conferencia de otoño, Dios hablo a mi corazón, y me hizo desafiar mi miedo a servir la obra, me hizo desafiarme a mi propio entendimiento y me hizo ver los campus listos para ser servidos. Me hizo dejar de refugiarme en mi mismo y pensar en una obra pequeña y comenzar a ver todo lo que Dios tiene preparado para mí.
Hoy celebramos y preparamos nuestro corazón, a través de esta conferencia de líderes y queremos fortalecernos en oración, y preparar nuestra obra para este año 2010. Dios ya ha comenzado a responder mis oraciones y sé que será un año lleno de retos y luchas. Al ver la gran obra que está por venir no puedo dejar de sentir incertidumbre y miedo, pero es porque aun me veo a mi mismo. En este próximo año Dios quiere que aprenda a depender completamente en El y solo en El, al servir la obra. La incertidumbre siempre está presente, aun ahora no se qué rumbos esta por tomar mi vida, sin embargo se que esos caminos los hare de la mano del Señor y que no estaré en problema, si me aferro a mi Señor y creo en él.
El versículo en el cual estará basado el año 2010 personalmente será: Marcos 9:23: “Jesús le dijo: Si puedes creer, al que cree todo le es posible.” Con este versículo quiero aprender a creer verdaderamente. No que no crea en el señor, sino que quiero aprender la actitud de siempre creer en el señor, sin importar el lugar o la situación en la que este, siempre creer en el señor, sin importar lo lejos o lo cerca que este de mi familia, siempre creer en el señor, sin importar lo bien o lo mal que este mi salud, siempre creer en el señor, si logro aprender la actitud de siempre creer en el señor, este nuevo año será de crecimiento y madurez espiritual. Yo se que en el diccionario de Dios no existe la palabra imposible, y que también debo de quitarla del mío, esta palabra solo es una escusa a mi falta de fe y a mi incredulidad. Quiero aprender de Dios y ver todas las cosas como posibles en la obra de Dios, para ello debo de aprender el espíritu de creer verdaderamente.
Le Doy gracias a Dios, porque nunca me ha abandonado y a lo largo de los años que llevo conociéndolo siempre ha respondido mis oraciones y este año más que nunca me permite nuevas pruebas y nuevos retos para enseñarme a depender y confiar en su misericordia y en el plan que tiene para mí.
Oro para que en este año pueda enfocarme en crecimiento y madurez espiritual basando mi año en Marcos 9.23. Con este versículo desafiar mi miedo y mi incredulidad y permitir a Dios hacer su gran obra a través de mi vida.
Una palabra: al que cree todo le es posible!
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