jueves, 11 de diciembre de 2008

EL NACIMIENTO DE JESUS


Mateo 1:18-25 [1:21]

Y dará a luz un hijo, y llamarás su nombre JESÚS, porque él salvará a su pueblo de sus pecados.

Pensando un poco en la situación por la cual estaba pasando José, saltan a la vista muchas preguntas, algunas de ellas serian, ¿Qué llegaría a pensar y que sentiría José en su corazón?, ¿Cuál fue la decisión de José y por qué lo hizo así? La situación era sin duda una difícil, estando José comprometido, social y legalmente con María, y estando aun apartados el uno del otro, seria prácticamente imposible que Maria estuviera embarazada.

En el interior de José llegó la duda, y pensaría que Maria, su amada, le había sido infiel, esto sin duda rompería completamente el corazón de José, el quedaría desecho y con mucha tristeza en su interior; aunque las hermanas piensan que los hombres no tenemos sentimientos, de vez en cuando los sentimientos también se presentan en nuestro corazón, aunque ustedes no lo crean.

Aunque José amaba a Maria con todo su corazón y el también esperaba el tiempo de boda con todo su corazón, esta situación seria razón suficiente para que él dejara a María, incluso para que la acusara y exigiera justicia. Sin embargo José solo decidió dejarla secretamente. Para evitarle una pena más y proteger la vida de Maria.

Dios quiso consolar el corazón de José y abrir sus ojos espirituales, para que ésta noticia que habría quebrado su corazón, fuera la misma noticia que le diera el verdadero gozo y que la recibiera como la buena nueva de gran gozo, no solo para él, sino para todos los hombres del mundo. En sueños Dios le permitió la visita de un ángel que le da la noticia a José, Y dará a luz un hijo, y llamarás su nombre JESÚS, porque él salvará a su pueblo de sus pecados.

María daría a luz, el hijo de Dios, En este mensaje el ángel le mostró la maravillosa obra que Dios estaba comenzando a través de sus vidas; el ángel le dejó conocer el maravilloso propósito que Dios tenia con la vida de este niño que María daría a luz, el seria JESÚS, es decir el que salvaría al mundo, en Jesús estaba cumplida la promesa de Dios.

En verdad sabemos poco de la vida de José, sin embargo este hecho de que el doblegó completamente su amor propio, y no le importó ser humillado públicamente junto con María, para el lo mas importante fue el mensaje que Dios le permitió a través del ángel, el escucho la palabra de Dios, y entregó su vida para cuidar la vida de Jesús y que el propósito de Dios se cumpliera. José también fue el siervo de Dios que acepto la palabra, entregando todo, humillándose a si mismo para la Gloria de Dios.

Dios nos llama, para ser participes de su obra, y en muchas ocasiones también tenemos que hacer decisiones grandes, decisiones por las cuales llegamos a ser criticados y hasta humillados, perdemos nuestros sueños del mundo, nuestras amistades, sacrificamos nuestro amor propio y hasta nuestros sueños de noviazgo, nuestros deseos de material, todos estos son tesoros que los hombres guardan celosamente, pero cuando el mensaje de Dios llega a nuestros corazones, y nosotros escuchamos la palabra y la depositamos en el corazón, conocemos que la palabra y la voluntad de Dios son los únicos tesoros que realmente tienen valor y que debemos de guardar celosamente.

En este tiempo de navidad Dios nos recuerda la gracia recibida a través de Jesús quien viene a salvarnos del pecado y que solo a través de el encontramos el verdadero camino a la salvación, la vida eterna y a Dios. Y esos son los únicos tesoros verdaderos que valen la pena guardar celosamente, entregando nuestra vida.

Oro para que en este tiempo de Navidad, recibamos nuevamente a Cristo en nuestro corazón, poniendo toda nuestra esperanza y nuestra vida en Cristo. Oro para que estas buenas nuevas de Gran gozo lleguen al corazón de los estudiantes, recibiendo a Cristo Jesús como su salvador.

Una palabra:

Jesús el salvador.

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